Noches horribles

Noches horribles

 

- Cuando visites a tus padres, ya sabes que debes decirles. Toda la luna de miel fue sorprendente. Mi esposo es simplemente maravilloso. Como no lo hagas te romperé cuando vuelvas a casa los huesos que te han quedado sanos. Debemos ser un matrimonio ejemplar a ojos de los demás.

De nuevo, pensó, la visita al psiquiatra no le valdría de mucho, pero lo intentaba. Desde el suicidio de su hija menor, su  preferida, las noches eran inconsolables, ebrias de pesadillas. Ella las calificaba, como profesora de latín que fue, de vae noctibus.

- Mire doctor yo nunca quise saber, pero la duda me corroía pensando que habíamos hecho mal con mi niña. Ahora sé que la única culpable fui yo. Me moriré con esa pena.

-Ya estoy insulsa, no deseo volver al club con mis amigas. Se me fue la vida después de lo de mi nenita. Diariamente  cuando terminábamos nuestro partido de golf, contábamos chistes mientras degustábamos nuestro te rojo, exportado exclusivamente de la india por el club. Ya no he vuelto a este ni creo que lo haga de nuevo.

- No me di cuenta de quién realmente era él. Fue un noviazgo muy efímero. Decía que deseaba formar una gran familia y hacernos abuelos. Tenía prisa en casarse. Y su matrimonio duró solo unos días. Un monstruo vestido con trajes hechos a medida, pero con una mente abyecta y criminal. 

Y lo que diariamente más me atormenta es que fui yo quien se lo presente a mi pequeña. Jugaba también al golf. Estaba convencida que era lo mejor para ella.

- Tantos remordimientos tengo, tanta culpa llevo en mi interior. Nunca volveré a ser feliz, lo sé, sin mi niña ya no.

- Continuamente le decía a mi marido que cuando volviese del cuartel dejase la pistola en la caja fuerte. Pero era despistado. Y otras por simple pereza la apoyaba en la mesilla del dormitorio, sin ninguna clase de seguridad. -¿Quien va a coger la pistola? me decía, en esta familia estamos todos equilibrados.

- Claro que estábamos todos cuerdos, pero a mi chiquitina la obligamos a casarse. 

No lo vimos. Por eso de los estamentos sociales, ya sabe. Lo hicimos con un tipo atroz que nunca supo lo que significaba la palabra afecto y ternura, como le digo.

- Mi cuerpo, así como mi espíritu están  vacios, ya no tiene sentido mi vida.

-La nota manuscrita encontrada en su dormitorio dejaba entrever los días infernales que fueron su luna de miel. Yo diría de hiel.

- Diga algo doctor, cuénteme algún chiste por favor, siempre lo hace.

- Bueno la que debe hablar es Vd, es la terapia menos agresiva y la mas compensatoria.

-Yo luego concluiré si le hace falta más medicación. Los chistes prometido, la próxima sesión.

- No intuimos nada cuando nos visitó después de su viaje de bodas. Doctor, solo le vimos su cara desencajada, pensamos que era del cansancio del viaje de bodas. Estuvieron en Sudáfrica.

- Voy a recoger unas cosas de mi dormitorio nos dijo, acto seguido escuchamos una detonación muy conocida por su padre y su amigo también militar. Era un disparo. Mi querida niña no podría aguantar la vida que le esperaba con aquel malnacido, pensó. Se había disparado.

La autopsia reveló hematomas por todo el cuerpo que según conclusiones del forense se debían a fuertes golpes.

El marido, ese diablo, como le digo, nos dijo que se había caído mi niña por las escaleras de un centro comercial. Mentira. La había machacado a golpes, vino con dos costillas rotas.

- Bueno doctor ¿creo que es la hora, verdad?. Me receta Vd. mis pastillas?

- No, hoy no y creo que nunca más. La penalidad que tiene Vd. Josefina no se aliviará con pastillas, es una pena del corazón. Y estas  son infinitas. Eternas. La llevará Vd. consigo hasta su muerte Las cicatrices producidas por los humanos son las más dolorosas. Hieren el alma. Y para esos males no hay remedio. Mientras exista la maldad en el ser humano, existirá el dolor hacia el prójimo.

-Gracias Doctor. Seguiré con mi eterna compañía entonces. Mis noches horribilis. 

ANEXO

       Rufina padece diferentes patologías a estudiar. Trastornos que se seguirán estudiando. Entre ellos. Síndrome de estrés postraumático. ¿O Trasferencia de personalidad? Todo debido  al suicidio de su madre.

           Fdo. Dtor Medina. Psiquiatra 

 

Manu & Willy